Las paperas son muy contagiosas y pueden transmitirse a través de gotitas respiratorias o al compartir objetos contaminados, como vasos o cubiertos. Los síntomas incluyen hinchazón de las glándulas salivales, dolor de cabeza, fiebre y malestar general. En casos graves, las paperas pueden causar complicaciones como infecciones de oído o meningitis.
El aumento de los casos de paperas entre los jóvenes puede atribuirse a una combinación de factores, incluida la disminución de la inmunidad debido a hábitos de vida poco saludables, la falta de vacunación adecuada y una mayor circulación del virus. Además, las paperas pueden confundirse con otras enfermedades, lo que puede provocar un infradiagnóstico y una propagación de la enfermedad.
Es importante que los jóvenes estén informados sobre los riesgos de las paperas y tomen medidas para evitar contraerlas, como vacunarse periódicamente, lavarse las manos con frecuencia y evitar compartir objetos personales con otras personas. Si sospecha que ha contraído paperas, es importante consultar a un médico de inmediato para recibir el tratamiento adecuado.